La dieta de los colores

Actualmente muchas webs sobre nutrición, salud y dietas se han interesado por conocer un poco más de cerca la llamada 'dieta de los colores' que se ha puesto de moda en los últimos años, sobre todo en Estados Unidos. Cada vez son más los nutricionistas que insisten en la necesidad de incorporar alimentos de todos los colores en nuestra dieta para conseguir que sea lo más variada y equilibrada posible. El principal motivo es que los pigmentos que determinan el color de los alimentos tienen beneficios contrastados para nuestra salud y también para la piel.

Alimentos morados: previenen el cáncer y las arrugas. Puedes recurrir a las berenjenas, moras, arándanos, uvas negras, uvas pasas, ciruelas normales y secas.

Alimentos verdes: son buenos para la vista, evitar el estreñimiento y reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Toma brócoli, kiwis, espinacas, lechuga, manzanas verdes o repollo.

Alimentos blancos: sirven para fortalecer tu sistema y prevenir catarros y gripes. Ayudan a cuidar tu aparato digestivo y reducir el riesgo de cáncer. Apúntate a las cremas de puerros o cebolla y a frutas como la pera.

Alimentos rojos: para tener una piel sana y eliminar toxinas. Entre ellos tenemos las cerezas, fresas, tomates, cebollas rojas, sandía y manzana roja.


Alimentos amarillos o anaranjados: ayudan a mantener huesos y dientes fuertes, una piel saludable y una buena vista. Recurre al mango, naranja, zanahorias, mandarinas, calabaza, piña o papaya.